La impresión del packaging es un tema extenso y difícil si no estas familiarizados, por eso, si tienes intención de empezar un nuevo negocio, la elección del packaging puede convertirse en un autentico quebradero de cabeza para escoger quién va a realizar las cajas, qué acabados ha de tener, ¿será automontable?, y sobre todo, qué tipo de impresión utiliza. Por ello, vamos a ayudarte a diferenciar sobre cuales, con pros y contras, son los mejores tipos de impresión para tu packaging.
Offset
El Offset es un tipo de impresión que deriva de la litografía, y emplea impresión de CMYK (con 4 tintas). Su funcionamiento es el siguiente: un laser graba sobre una plancha, generalmente de caucho, el diseño que queremos imprimir, por lo que se le aplica tinta a la plancha marcada. Después, el material va pasando por los rodillos marcados, donde la impresión queda plasmada. Hace que la impresión quede muy nítida y de alta calidad debido a que no imprimimos directamente sobre el papel, si no que es el caucho quien recibo la primera tinta. Por lo tanto, los poros absorben el sobrante de tinta y no queda plasmado en el material.
Como puntos negativos, no todas las impresoras pueden imprimir con esta técnica, ya que necesitan planchas especiales para llevar el material que son muy costosas. Tampoco pueden manipularse el trabajo hasta pasadas las 24 horas, además de que todos los impresos han de ser iguales, ya que son tiradas largas.
Nosotros recomendamos este tipo de impresión cuando las vas a utilizar como caja de venta y con una intención más exclusiva y de edición limitada.
Flexografía
También conocida como “Flexo”, funciona a la perfección con packagings flexibles y sobre cartón corrugado. Como parte positiva, este tipo de impresión tiene un bajo coste por unidad además de que las piezas necesarias para su impresión también son baratas. Además se pueden utilizar tintas acuosas y aceitosas.
Aun así, también tiene algunos puntos negativos como que tiene peor calidad de impresión que la litografía, o que a la hora de utilizar colores suaves o en procesos de 4 colores, la impresión empieza a dar problemas. Los colores en flexografía están limitados (aunque tiene un catálogo con varias referencias) pero al “mezclarse” con la superficie del cartón, no acostumbra a tener un resultado muy vibrante.
Por lo tanto, este tipo de impresión es recomendable cuando vas a hacer cajas de envío con fondos impresos o con logos que pueden verse.
Digital
También conocida raramente como “Ink Jet”, Este tipo de impresión suele utilizarse en etiquetas, prototipos, cajas con cartón corrugado y también en las laminadas, así como en los film para packagings flexibles. Las ventajas que tiene esta técnica es que no tiene coste a la hora de montar módulos especiales, además de imprimir relativamente rápido. Por ello, los pedidos mínimos para que salga rentable son bajos con una calidad inferior a la de la litografía.
Sin embargo, como punto negativo, es que hacer pedidos de gran volumen es caro ya que el coste por unidad es más alto, por lo tanto es recomendable si necesitas cajas de venta y de envío pero en pocas cantidades.
Rotograbado
También conocida como “huecograbado”, este tipo de impresión funciona bien con packaging flexible y con cartones laminados. Su calidad de impresión es muy alta, por lo que que puede imprimir imágenes y añadir colores PMS de manera similar a la litografía, además de no perder calidad de impresión aunque se impriman grandes cantidades de producto.
La parte negativa es que no hay muchos materiales sobre los que se pueda imprimir con este técnica, además de que necesita una gran inversión en maquinaria. Para sacarle provecho al rotograbado hace falta imprimir grandes volúmenes, aunque también tiene un largo tiempo de impresión.
Serigrafía
La serigrafía funciona muy bien sobre cualquier tipo de soporte. Esta técnica se suele utilizar principalmente sobre packaging prefabricado, como son las botellas, tazas, camisetas y similares, ya que no necesita grandes volúmenes para que sea rentable. Además su impresión no está limitada a una superficie plana, es decir, se puede imprimir con volumen y sobre objetos.
Aun así, como todo, tiene sus puntos desfavorables. Su producción acostumbra a ser más lenta que la de la litografía. No puede reproducir imágenes con gran calidad, por lo que no se ve tan nítido si necesitas poner una fotografía o una imagen con CYMK.
Por lo tanto, este tipo de impresión es recomendable para impresiones no fotográficas, y también es mejor para impresiones de una sola tinta, ya que con varias el precio se incrementa.
A continuación, puedes ver una tabla que te ayudará a orientarte con todo lo que hemos explicado. Ahora solo te queda ver cual es tu packaging ideal y aplicar la técnica de impresión que mejor le vaya.