La innovación constante y la capacidad de adaptarse a la evolución del mercado son dos elementos imprescindibles para que una empresa evolucione y crezca. Garrofé Brand&Pack es un buen ejemplo de agencia que ha evolucionado siguiendo la demanda del mercado y que, partiendo de un modelo de negocio asociado al diseño y el packaging tradicional, se ha especializado en gestionar la imagen, el packaging y el branding de una marca.
En esta evolución ha entrado un nuevo protagonista del que ya no se puede prescindir: Internet, y el desafío que conlleva construir una marca en la red. Este reto se complica cuando hablamos de marcas que necesitan transmitir confianza y fiabilidad debido a la naturaleza de su producto, como ocurrió con la nueva marca de cosmética médica KPS.
Kern Pharma y Skeyndor, empresas fundadoras, querían crear una marca que huyese del punto de venta convencional en farmacias y parafarmacias. Sus productos debían venderse dentro de un soporte exclusivo que aportase fiabilidad al cliente. Así, junto con Garrofé nació el proyecto KPS, un nuevo concepto dentro del sector de la cosmética médica con un business model completamente revolucionario: un ecommerce de acceso restringido donde sólo se puede comprar bajo prescripción médica.
Cuando hablamos de cualquier producto prescrito por un médico, buscamos marcas que nos transmitan calidad, credibilidad y seguridad. Ésa fue la principal dificultad con la que se encontró Garrofé a la hora de crear la presencia online de KPS Vital. Se planteaba un proyecto complejo: crear la imagen completa de una marca que abre las puertas del comercio online a un sector tradicional, como es el de la medicina estética. ¿Cómo conseguirlo?
Para Garrofé el reto fue desarrollar el nuevo concepto médico-estético que había presentado el cliente. No estamos hablando de un ecommerce convencional, sino de una plataforma de acceso restringido, y esa limitación es la que le aporta confianza al usuario donde el paciente solo puede adquirir los productos que se le han prescrito. Cuando un médico receta un producto de KPS, le proporciona al paciente un código de receta. Éste entra en la web, introduce el código y puede comprar los productos recetados, permitiendo un seguimiento médico en cada tratamiento.
El hecho de ofrecer cosmética médica a través de un ecommerce tenía que estar muy relacionado con la confianza, ya que Internet no es el medio convencional para vender este tipo de productos. En KPS fueron varios los elementos ideados para aportar esta fiabilidad: el acceso restringido sólo a pacientes, la realización de la compra bajo control médico y el hecho de poder adquirir productos exclusivos a los que no se accede por ningún otro canal de venta.
Así, lo que comenzó siendo un trabajo de naming y diseño se convirtió en la creación de una marca médico-estética con un ecommerce propio y una imagen que aportaba a KPS un status de marca elevado, posicionándola como una línea médico-estética de carácter premium.